Cronología de la campaña de Perú

Una vez lograda la independencia de Chile, San Martín se dedicó a preparar la expedición libertadora hacia el Perú. Para ello solicitó la ayuda de los gobiernos de Chile y el Río de la Plata. El Director Supremo de Chile, Bernardo O’Higgins, estaba convencido de que la independencia de su patria no estaría consolidada mientras no se destruyera el poderío español en el Perú, y por tanto, prestó toda la ayuda de su gobierno para que la expedición se realizara.
Por su parte los patriotas peruanos mantenían contacto con San Martín, enviándole noticias sobre el ejército realista del Perú, los elementos con que contaría a su llegada, los lugares de la costa más propicios para realizar el desembarco y muchos otros datos más.
El primer objetivo que se propuso San Martín era que Chile arrebatara el dominio del mar al virrey del Perú, lo que se consiguió. El gobierno chileno compró algunos buques; otros los proporcionó el gobierno rioplatense y el resto fueron capturados a los españoles. Para 1818, la escuadra chilena contaba con más de diez buques. En noviembre de dicho año llegó a Valparaíso el marino británico Lord Thomas Cochrane, contratado por el gobierno chileno para que asumiera el mando de la escuadra.

Conformada así la Escuadra Libertadora y mientras se alistaba el ejército, Cochrane realizó dos expediciones al Perú con el objeto de llevar emisarios secretos para que se contactaran con los patriotas foráneos; repartir proclamas; reconocer los sitios donde maniobrarían el ejército y la escuadra libertadora; hostilizar a la escuadra española para quitarle completamente el dominio del mar y apoderarse de los cargamentos valiosos que eran remitidos a España. Estas dos expediciones se cumplieron con todo éxito.

El operativo inicial del general San Martín estaba demostrando en la práctica que el plan para liberar al Perú, bastión del colonialismo, estaba bien concebido. Los españoles no tenían una escuadra bien equipada, por lo que la expedición de Cochrane frente a la costa peruana mostró eficiencia y causó temor a los realistas. San Martín preparó así con mayor seguridad su expedición al Perú. Para atraer a la aristocracia peruana, sobre todo la limeña y la trujillana, San Martín les ofreció establecer un reino en el Perú, cuyo trono sería ocupado por un miembro de la realeza española, sin cambiar las estructuras sociales incluso manteniendo al mismo ejército realista. Dicha opinión no la cambiaría nunca, porque estaba convencido de su aplicabilidad.

Los recursos económicos de la Expedición Libertadora del Sur para trasladarse de Chile a Perú fueron costeados principalmente por comerciantes de Valparaíso, a quienes se les ofreció, como recompensa, el envío de sus mercancías al Callao, sin recargo aduanero, una vez producida la independencia del Perú; cosa que se cumplió a cabalidad.

Desembarco en Pisco (7 de septiembre de 1820)

El desembarco ocurrio el 7 de septiembre de 1820, allí, San Martín instala su puesto de comando. Ocupa esa tarde, las poblaciones de Caucato y Chincha El jefe enemigo, coronel Quimper, se repliega sin ofrecer resistencia hacia Ica e informa al Virrey Pezuela.

Armisticio de Miraflores  (26 de setiembre a 4 de octubre)

Cumpliendo instrucciones de la península, el virrey Pezuela invitó a San Martín a concertar la paz y éste resolvió negociar sin dejar de consolidar por ello su ocupación de la costa ni abandonar los preparativos para las expediciones al interior. El virrey designó representantes a Hipólito Unanue, al conde Villar de la Fuente y al teniente de navío Dionsio Capaz; San Martín delegó su representación en el coronel  José Tomás Guido y en Juan García del Río. Los comisionados se reunieron en Miraflores, al sur de Lima, el 26 de setiembre, y acordaron un armisticio suspendiendo las hostilidades hasta el 4 de octubre para celebrar conferencias de pacificación.

Primera campaña del general Arenales a la Sierra (4 de octubre de 1820 al 8 de enero de 1821)

Entre el 4 de octubre de 1820 al 8 de enero de 1821 se realiza la primera campaña del general Arenales a la Sierra que tenía como objetivo levantar en rebeldía las provincias de la Sierra, capturar fuerzas enemigas y coordinar su acción con la masa del ejército patriota hacia el Norte. Las acciones principales de esta campaña fueron: Combate de Palpa, Combate de Nazca, Combate de Acaril, Combate de Mayo, Combate e Tarma

Combate de Palpa (7 de octubre de 1820)

La caballería de Arenales al mando de Rufino Guido, vence a las fuerzas del coronel Quimper. Dos compañías se pasan a los patriotas y el resto se dispersa.

Combate de Nazca (15 de octubre de 1820) 

El teniente coronel Manuel Rojas, al frente de 160 hombres, sorprende y derrota a la agrupación del Coronel Quimper.

Combate de AcariI (16 de octubre de 1820)

El Teniente Vicente Suárez con 30 Cazadores, ataca una columna realista a la que derrota y se apodera de importante cantidad de municiones.

Combate de Mayo (11 de noviembre de 1820) 

Al mando de Lavalle, las fuerzas patriotas derrotan a los efectivos realistas que ocupan el río Mantaro.

Combate de Tarma (23 de noviembre de 1820)

El teniente coronel Rojas venció a los realistas, apoderándose de importante material logístico.

Combate de Cerro de Pasco (6 de diciembre de 1820)

Esta zona se encontraba por una posición realista al mando del general O'Reilly. El general Arenales sorprende al enemigo ocupando las alturas del Cerro de Pasco y triunfa rápidamente. Arenales se reincorporó a la masa del ejército el 8 de enero de 1821.

Ocupación del Valle del Huara. Resolución de Pezuela. (Noviembre de 1820 ) 

El ejército patriota desembarca en Huacho a la espera de las fuerzas de Arenales y por su parte, el virrey Pezuela reúne unos 7.000 hombres al norte de Lima y envía una avanzada de unos 2.000 efectivos al mando del coronel Valdéz.

Deserción del batallón Numancia  (Diciembre de 1820 ) 

El 3 de diciembre de 1820 se produce la deserción del Batallón Numancia. Esta batallón estaba integrado mayoritariamente por peruanos, colombianos y venezolanos, quienes decidieron incorporarse al ejército patriota para luchar por la libertad de su tierra.

Destitución del Virrey Pezuela (Enero de 1821)

San Martín decide atacar al grueso del ejército realista que se encontraba próximo a Lima, y con este propósito el ejército patriota inició su avance el 5 de enero. Las fuerzas de Arenales se incorporan al ejército el 8 de enero, y el 29, el virrey Pezuela es destituido de su cargo y en su reemplazo es nombrado el general José de la Serna.

Primera expedición de lord Cochrabe a puertos intermedios (Marzo a mayo de 1821)

El objetivo de esta expedición era accionar sobre los puertos ubicados entre El Callao y Arica, así como encubrir la segunda campaña de Arenales a la Sierra. Para llevar adelante esta misión, las fuerzas del general Miller desembarcan en Pisco y ocupan nuevamente la localidad de Chincha. Luego reembarcan nuevamente y desembarcan en Sama, mientras la escuadra bombardeaba Arica. Nuevamente triunfa Miller y después de recibir refuerzos ocupó Tacna. Más tarde Miller derrota nuevamente a los realistas en Mirave.

Segunda misión del general Arenales a la sierra (Abril a Junio de 1821)

Tenía como objeto ocupar el valle de Jauja, reclutar soldados y contactarse con las fuerzas de Miller. Ocupa Huancayo y aguarda allí el enfrentamiento con las tropas realistas al mando de Canterac, pero éste marchó hacia Huancavelica. Enterado, Arenales decide marchar tras él, pero en plena marcha San Martín le ordena regresar a Lima, que ya estaba en poder de los patriotas.

Ocupación de Lima y proclamación de la independencia del Perú (28 de julio de 1821)

San Martín entró a Lima en el anochecer del 12 de julio de 1821; iba sin escolta, sin más compañía que la de un ayudante.
¿Porqué tardó San Martín en ocupar la ciudad pudiendo haberlo hecho mucho antes?
Así lo testimonió el Libertador:
"La gente se pregunta -decía- por qué no marcho sobre Lima al momento. Lo podría hacer e instantáneamente lo haría, si así conviniese a mis designios; pero no conviene. No busco gloria militar, no ambiciono el título de conquistador del Perú; quiero solamente librarlo de la opresión. ¿De qué me serviría Lima, si sus habitantes fueran hostiles en opinión pública? ¿Cómo podría progresar la causa independiente si yo tomase Lima militarmente y aun el país entero?...Muy diferentes son mis designios. Quiero que todos los hombres piensen como yo y no dar un paso más allá de la marcha progresiva de la opinión pública; estando ahora la capital madura para manifestar sus sentimientos, le daré oportunidad de hacerlo sin riesgo. Todo mi deseo es que este país se maneje por sí mismo. En cuanto a la manera en que ha de gobernarse, no me concierne en absoluto. Me propongo únicamente dar al pueblo los medios de declararse independiente, estableciendo una forma de gobierno adecuada, y verificado esto, consideraré haber hecho bastante y me alejaré."
Así las cosas, el 28 de julio el Cabildo celebró una reunión extraordinaria. En ella desplegó por primera vez la bandera independiente del Perú y proclamó: "Desde este momento el Perú es libre e independiente por la voluntad general del pueblo y por la justicia de su causa que Dios defiende."

Combate de Nazca
Combate de Nazca
Luego del triunfo del comandante Rufino Guido, obtenido en en Palpa el día 7 de octubre, le siguió otra victoria obtenida por las armas libertadoras en el Perú. El teniente coronel Manuel Rojas, al frente de 250 hombres, entre los que iban el entonces mayor Juan Galo de Lavalle, el capitán Federico Brandsen y el teniente José Vicente Suárez, atacó y venció en la Hacienda de Chaquía, Nazca, al grueso de una columna realista, compuesta de 700 soldados españoles mandados por el marqués de Quimper, que quedó muerto en el campo de batalla. Gran número de prisioneros, armamentos y muchos pertrechos de guerra cayeron en poder de los vencedores, que siguieron luego su marcha hacia el Norte. Al día siguiente- el teniente Suárez, luego de una marcha rápida y hábil, cayó sobre el último convoy y armamentos, en inmediaciones del pueblo de Acasí, y se lo arrebató al enemigo poniéndolo en fuga.


Batalla de Cerro de Pasco
Batalla de Cerro de Pasco
La Batalla de Pasco tuvo lugar en la primera campaña de Arenales a la sierra durante la guerra de independencia del Perú en la fecha del 6 de diciembre de 1820, enfrentando a las fuerzas independentistas contra los realistas de la fuerza de O'Reilly, enviada desde Lima por el virrey Pezuela para cortar el paso a las tropas de Arenales en su retorno a la costa, con el resultado de la destrucción de la división O'Reilly.


Combate de los Pescadores y un Acto heroico del Teniente Pringles
Combate de los Pescadores y un Acto heroico del Teniente Pringles 
San Martín envió al coronel Rudecindo Allvarado con 700 hombres, para que protegiese la marcha de esa unidad. Alvarado avanzó por el camino de la costa y al llegar al Huachi, envió al teniente Juan Pascual Pringles, junto con 25 granaderos, a contactarse con oficiales del batallón Numancia. El 25 de noviembre de 1820 durante su marcha el grupo fue sorprendido por una unidad realista compuesta por tres escuadrones de caballería al mando del coronel Gerónimo Valdés. La diferencia de fuerzas era insuperable y después de una heroica resistencia, los pocos patriotas sobrevivientes se replegaron sobre la costa de las playas de Chancay bañadas por el Pacífico. Al llegar a una playa llamada De los Pescadores, Pringles, viéndose perdido y con las dos terceras partes de sus soldados muertos y el resto con sus caballos cansados, antes que rendirse al enemigo, se arrojó resuelto a perecer en el mar. Sus soldados, siguiendo a su jefe, espolearon a sus cabalgaduras y también lo hicieron con él. El coronel Valdés, impresionado por esa demostración de coraje, ofreció una rendición honrosa a los patriotas cuando ya las olas casi cubrían a los caballos. El grupo fue enviado a la prisión del Callao donde permaneció poco tiempo hasta que consiguió la libertad, gracias a un posterior canje de prisioneros. 



La deserción del Batallón Numancia
La deserción del Batallón Numancia 
El batallón Numancia era uno de los mejores cuerpos del ejército realista en Sudamérica, para lograr el apoyo del Numancia también se sumaron los padres del oratorio de San Felipe Nery quienes influyeron en los jefes del batallón. Tomás Heres fue uno de los primeros en ser convencidos para cambiarse y abandonar las filas del Rey de España. Heres logró convencer a su vez a otros jefes y oficiales del Numancia. Luego de comunicaciones con el general San Martín, el batallón “Numancia” que se encontraba en la hacienda de Palpa, en Chancay, poblado al norte de Lima se iniciaron las acciones. Tomás Heres arrestó al coronel de la división de caballería D. Ruperto Delgado y cuatro oficiales, a quienes luego lograron convencer de pasarse al ejército de San Martín, aprovechando que el coronel Gerónimo Valdez se hallaba delante del Numancia. Durante la madrugada del 3 de diciembre  los conspiradores sublevaron al batallón y se pasaron a las filas de San Martín , a la 1 de la tarde del 3 de diciembre las tropas del Numancia fueron recibidas por el coronel Alvarado.  Con esta deserción el ejército libertador pudo contar con 650 soldados. El general San Martín declaró al batallón “Numancia” como leal a la patria, ascendió a los jefes de la tropa. La noticia causó un gran impacto: los realistas vieron esto como un gran revés, los que estaban a favor de la independencia fueron al norte a ponerse a órdenes de San Martín. Incluso tuvieron el atrevimiento de poner una bandera del ejército libertador en el cerro San Cristóbal.


Retrato del Virrey Joaquín de la Pezuela , marqués de Viluma
Retrato del Virrey Joaquín de la Pezuela , marqués de Viluma
Joaquín González de la Pezuela  fue un noble y militar español, nombrado I marqués de Viluma tras derrotar al general rioplatense José Rondeau en la Batalla de Viluma o de Sipe Sipe,​ fue nombrado trigésimo noveno virrey del Perú  entre el 7 de julio de 1816 y el  29 de enero de 1821). Fue derrocado el 29 de enero de 1821, por  los jefes liberales, dirigidos por el general José de la Serna, por medio del llamado Pronunciamiento de Aznapuquio.




José de la Serna
José de la Serna 
José de la Serna en 1821, a raíz del pronunciamiento militar de Aznapuquio que culminó con el derrocamiento del virrey Pezuela, entonces José de la Serna fue designado virrey del Perú, título que más tarde fue confirmado oficialmente.
José de la Serna no aceptó la independencia del Perú  y se enfrentó a las fuerzas del general San Martín se trasladó entonces la capital del virreinato a Cuzco y continuó combatiendo hasta la decisiva batalla de Ayacucho en 1824, en la que el ejército independentista de Simón Bolívar, bajo la dirección de Antonio José de Sucre, se alzó con la victoria; la derrota de Ayacucho supuso para España la pérdida definitiva de sus posesiones en el continente americano.