Prosperidad y progreso material

El país se hallaba en una etapa de ascenso y se desarrollaba progresivamente por impulso de la industria creciente, de la agricultura y la ganadería que tenían buena colocación en los mercados europeos y por las fuerzas culturales en acción, fruto de la siembra de muchos años. 


El presidente Quintana inauguró en mayo de 1905 las sesiones del Congreso con un mensaje eufórico:

"Las cifras y los datos concretos que corresponden a cada ministerio, anuncian una época de excepcional prosperidad. Tenemos el deber común de no comprometerla. La impaciencia y la ambición no pueden sobreponerse a los intereses del país, dondequiera que nos hayan encontrado, en la llanura o en la cumbre, estas horas críticas de la vida nacional. Apelo a la razón de mis conciudadanos. No les pido que permanezcan en la inercia ni que se dejen do-minar por el sensualismo. Los incito a la acción regular y serena de las naciones bien organizadas. La vida republicana puede desenvolverse dentro del orden, porque de otra manera no sería una forma civilizada de gobierno la que hemos adoptado. Dejemos que la República dé este gran paso hacia sus destinos. Tengo el presentimiento de lo que vamos a hacer en poco tiempo si trabajamos con ahínco y mantenemos patrióticamente la paz interna. Progresaremos en todos los órdenes de la actividad humana, difundiremos la civilización y la cultura hasta los confines del territorio; veremos dilatarse de año en año el círculo de la tierra cultivada; produciremos como los países populosos y se llenarán de oro nuestras arcas. En las provincias del litoral hasta donde alcanzan nuestros ríos navegables; en las provincias del interior hasta donde llegan nuestras líneas férreas y en los mismos territorios del sur, sobre las costas del Atlántico; en los valles profundos de la cordillera, se diseñarán, por fin, definitivamente, con la ayuda de Dios, los caracteres visibles de una gran Nación".

galletitas, las Mitre

En 1902 para honrar al ex presidente Mitre y con autorización del mismo (puño y letra), surge el segundo éxito como fabricante de galletitas, las Mitre 

Se dio un fuerte impulso a la construcción de líneas telegráficas nuevas; disminuyeron las tasas que gravaban el consumo; se estabilizó el régimen monetario; fueron regularizadas las cuentas de la administración y se hicieron importantes reformas en la enseñanza y en la administración de la justicia.

La agricultura ensanchó considerablemente el área de los cultivos; los 4.892.000 hectáreas que se cultivaban en 1895, llegaron en 1905, diez años después, a 12 millones y el aumento seguía vertiginoso; en 1910 pasaron de 19 millones de hectáreas; los tres productos básicos: trigo, lino y maíz, aumentaron su área desde el año agrícola 1902-1903 al de 1904-1905 en 1.600.000 y la producción ce-realista aumentó este último año en un millón de toneladas.

El intercambio comercial muestra en 1905 una superación de las cifras de las exportaciones del año anterior, que excedieron en 117.689.421 pesos oro el valor de las importaciones. Hasta el año 1915 no volvió a ser superado ni alcanzado el nivel del intercambio y el saldo favorable de aquel año.

Publicidad

El campo se tecnificó por ingresos de los buenos precios de la cosecha, los importadores ponían grandes publicidades

Las rentas de la Nación alcanzaron en 1905 a 90 millones de pesos oro y los gastos administrativos pasaron a 141 millones, pero la deuda pública se redujo de 426 millones en 1904 a 384 millones en 1905; ya en 1906 pudo señalar el ministro Terry un superávit de dos millones y además 11 millones destinados al fondo general de conversión, listos para cualquier eventualidad. En marzo de 1906 aseguró al presidente Quintana que la deuda pública no sólo no había aumentado durante su gobierno, sino que había disminuido.

La deuda externa, al 31 de diciembre de 1904, era de 370.732.000 pesos oro; al 31 de diciembre de 1905 era de 365.671.000.

La deuda interna, en el mismo período, la de oro, disminuyó en 200.000 pesos; la de papel pasó de 89.174.000 a 88.183.000.

El capital de las empresas ferroviarias aumentó en 33 millones de pesos oro y eso favoreció otra nueva extensión importante de las redes, que se inició en 1905.

El censo de 1904 señala la existencia de 8.877 establecimientos industriales con 68.512 obreros y 17.985 negocios comerciales con 79.549 dependientes.

La inmigración alcanzó en 1905 a 221.622 personas y aunque emigraron 82.722, siempre quedó un saldo de 138.900 personas en el país.

avisos

Debido a la buena situación económica empezaron a proliferar nuavas empresas y junto con ellas publicidades en las diferentes revistas y medios gráficos.