La contaminación de aguas continentales

La carga de vertidos urbanos, agrícolas o industriales a las aguas continentales (ríos, lagos y aguas subterráneas) ha aumentado tanto que se ha convertido en un problema de gran importancia.

La autodepuración natural

Aunque los medios acuáticos reciben a diario miles de toneladas de residuos, existen unos microorganismos, las bacterias descomponedoras, que transforman todos los restos orgánicos del agua en materia mineral sencilla.

Esta materia mineral, o bien se disuelve, o bien precipita en el fondo, devolviendo al agua su claridad y transparencia (autodepuración).

El problema surge cuando los vertidos como metales pesados, bacterias patógenas y otras sustancias superan la capacidad de autodepuración de los medios acuáticos. Estos elementos permanecen en el agua y limitan sus usos normales.


Indicadores de contaminación

Las especies de animales, plantas y algas también se modifican según la calidad del agua. Por eso algunos de ellos se utilizan como indicadores de contaminación del agua.

La demanda bioquímica de oxígeno, DBO, es un indicador para medir la contaminación del agua por materia orgánica. Si no hay oxígeno, las bacterias no pueden descomponer la materia orgánica y aumenta la contaminación del agua.

Lago contaminado.
Lago contaminado.
El vertido de productos industriales, basura, a los lagos produce su rápida contaminación. La acumulación de materia orgánica, aunque menos visible, también provoca la alteración del lago por el fenómeno de la eutrofización.





Autodepuración de un río

Autodepuración de un río La autodepuración.
Autodepuración de un río La autodepuración es el proceso de recuperación de un curso de agua después de un episodio de contaminación orgánica. En este proceso los compuestos orgánicos son diluidos y transformados progresivamente por la descomposición bioquímica, aumentando su estabilidad.



La eutrofización

Los vertidos de sustancias contaminantes a los medios acuáticos son los más impactantes, ya que deterioran la calidad del agua y hacen imposible la vida en ella. Una consecuencia es la eutrofización, que se produce cuando las aguas reciben aportes de sustancias inorgánicas como el fósforo, el nitrógeno o el azufre, que son factores limitantes para los organismos fotosintéticos. Las algas planctónicas aumentan mucho su número y las más superficiales impiden que llegue la luz a las capas inferiores. Cuando las algas mueren, van al fondo, donde son descompuestas por bacterias que llegan a consumir todo el oxígeno del agua. Además, toda la materia orgánica se pudre.

Los nutrientes que comienzan este proceso proceden de vertidos industriales, detergentes ricos en fosfatos, fertilizantes arrastrados por el agua de lluvia..

La prevención se puede realizar evitando los vertidos incontrolados, instalando depuradoras, reduciendo el consumo de detergentes ricos en fosfatos y evitando la contaminación industrial.


La contaminación en aguas subterráneas

Llamamos acuífero a toda acumulación de agua subterránea, que se puede utilizar para diversos fines.Los acuíferos se pueden contaminar por la llegada de agua de lluvia que arrastra sustancias tóxicas, y que se infiltra en la tierra. Pero también por razones más complejas. Por ejemplo, la explotación de acuíferos que se encuentran en algunas zonas costeras hace que el nivel de agua acumulada baje, permitiendo la entrada de agua del mar en el acuífero. Se produce así una salinización del agua del acuífero, que la inutiliza para muchos de los usos habituales.

Riego de los acuíferos.
Riego de los acuíferos.
En muchos lugares existen acuíferos que se aprovechan para el consumo humano o bien para el regadío.


Contaminación de acuíferos

Contaminación de acuíferos.
La contaminación del agua subterránea ocurre cuando agentes contaminantes son liberados al suelo o subsuelo y luego migran hacia el acuífero. Esto también puede ocurrir de manera natural debido a la presencia de elevadas concentraciones de constituyentes minerales existentes en el acuífero. Estos contaminantes son capaces de crear una pluma dentro del acuífero. El flujo subterráneo y la dispersión pueden hacer que el contaminante se extienda a lo largo de una extensa área. El frente de avance de dicha pluma puede intersectar un pozo de agua o descargar a la superficie en forma de vertiente y escorrentía haciendo que estas aguas no sean seguras para el ser humano ni para la vida silvestre. El movimiento de dichas plumas puede analizarse a través de modelos computacionales de transporte de solutos en aguas subterráneas. El análisis de la contaminación de las aguas subterráneas puede enfocarse en las características del suelo, geología e hidrogeología del sitio y en la naturaleza de los contaminantes. La contaminación puede ocurrir de fugas desde sistemas de saneamiento básico, aguas residuales, vertederos, estaciones de servicio, o de la aplicación de fertilizantes en la agricultura. También puede ocurrir a partir de contaminantes naturales existentes en el acuífero como el arsénico o el fluoruro. El uso del agua subterránea contaminada puede causar daños en la salud a través de intoxicaciones o la propagación de enfermedades. Existen varios mecanismos que influyen en el transporte de contaminantes en las aguas subterráneas, por ejemplo la difusión y la adsorción de contaminantes, o la precipitación de minerales dentro del acuífero. La interacción entre el agua subterránea y las aguas superficiales también se puede analizar a través de modelos hidrológicos.