Las elecciones

Una vez sancionada la constitución el 19 de mayo de 1853, promulgada en San José de Flores el 25 del mismo mes, procedía aplicarla en lo político y traducirla en lo administrativo.



La situación del país

El gobierno federal era el instrumento que debía aplicar la ley fundamental aprobada. El país tenía tras de sí cuarenta años de guerra, primero por la independencia, y luego, y simultáneamente, de guerra civil. Ese pasado de disgregación localista, de ambiciones y recelos de caudillos, había dejado hondas huellas; las luchas intestinas enconadas habían dispersado las familias; la instrucción popular se había reducido a la mínima expresión; las comunicaciones fueron abandonadas o destruidas por el tiempo; los indios se habían aprovechado de la ruptura del equilibrio establecido por Rosas y las autoridades se vieron impotentes para contener sus devastaciones; el comercio propiamente no existía; las industrias carecían de empuje y de créditos; la ganadería había sido diezmada por las exigencias de la guerra; los habitantes no tenían noción de lo que era hacer uso normal de sus derechos políticos; habían vivido hasta allí en el sometimiento a los caudillos de turno y a sus secuaces.

Hacía falta mucho valor y mucha fe para entregarse a la reconstrucción de la nación en aquellas condiciones deplorables, con una herencia de belicosidad y de recelo que lo invadía todo y con un nivel económico primitivísimo y un estado financiero exhausto. 

Urquiza no vaciló en asumir la responsabilidad de ese empeño, a pesar de la resistencia que le ofrecía el gobierno de Buenos Aires —contrario a la unión nacional bajo la inspiración del gobernador entrerriano— y que se segregó del resto de las provincias, dificultando así el rápido resurgimiento del país.

Asuncion de Urquiza

Urquiza asume la presidencia en un contexto desfavorable deberá gobernar sin los recursos procedentes de la Aduana porteña.

Las elecciones

Las elecciones provinciales de primer grado se realizaron el 1° de noviembre de 1853 en once provincias, pues Buenos Aires, Tucumán y Santiago del Estero no convocaron a su electorado, la primera por haberse separado como Estado independiente y las otras por hallarse en guerra entre ellas.

Las Juntas electorales practicaron el escrutinio el 20 de febrero de 1854; de los 128 electores que formaron el colegio electoral, votaron 106 y de ese total 94 lo hicieron por Urquiza como presidente de la Confederación; Mariano Fragueiro recibió 7 votos y Facundo Zuviría, Benjamín Virasoro, Vicente López y Pedro Ferré, uno cada uno y para la vicepresidencia resultó electo Salvador María del Carril por decisión del Congreso, pues ni él ni Facundo Zuviría ni Rudecindo Alvarado habían conseguido mayoría absoluta.

Los electos tomaron posesión de sus cargos el 5 de marzo, después de prestar juramento ante el Congreso constituyente en el viejo cabildo de Santa Fe.

Salvador María del Carril

La elección del vicepresidente no fue tan sencilla ya que ningún candidato obtuvo mayoría absoluta y le correspondió al Congreso Constituyente decidir entre los postulantes más votados, resultando electo Del Carril sobre Zuviría por una votación de 17 a 1.