Antecedentes de la conquista

La historia de la conquista y la colonización del territorio argentino puede tomar su punto de partida en la fundación de Buenos Aires por Pedro de Mendoza en 1536, pero su despoblación en 1541 interrumpió el desarrollo. El aislamiento de Asunción del Paraguay fue como un brote autónomo que se mantuvo en condiciones especiales hasta sentir el impulso de volver a poblar centros urbanos que sirvieran estratégicamente a las comunicaciones con España. 
Pero antes de ese impulso poblador de Asunción, ya habían entrado en acción fuerzas conquistadoras y colonizadores de otro origen, las que conformaron la gobernación del Tucumán: Jujuy, Salta, Catamarca, La Rioja, Tucumán, Santiago del Estero y parte del Chaco.

Antecedentes

A mediados del siglo XVI la jurisdicción de Chile comprendía parte de Catamarca y La Rioja, Santiago del Estero y Córdoba. El impulso para el conocimiento, la conquista y colonización de esas tierras partió del Alto Perú y de Chile. 

En 1583, el Tucumán, era un gran territorio muy poblado de diferentes tipos de tribus indígenas y  fue sometido a la autoridad del virrey del Perú y en lo judicial a la autoridad de la audiencia de Charcas. 

Esas provincias norteñas, administrativamente organizadas, se fusionaron en lo que se llamó Gobernación del Tucumán, juríes, diaguitas y comechingones.

chuquisaca

Documento de la audiencia de chuquisaca de 1615

Fundación de Chuquisaca

Pedro de Anzúrez fundó en 1538 la ciudad de Chuquisaca, que se puede traducir como "Puente de Plata". En 1559, cuando llevaba ya el nombre de La Plata, recibió de Carlos V como símbolo o escudo el águila de dos cabezas, la ciudad está ubicada a 1.700 metros sobre el nivel del mar, entre los cerros Churukella y Sicarica y la región había sido habitada por los indios charcas, de donde procede el nombre que se le dio también, Charcas. 

En el año 1839 cambió de nombre y se la llamó Sucre, en homenaje al lugarteniente de Bolívar, vencedor en la batalla de Ayacucho . 

La ciudad tenía dos viejos edificios marcan el desarrollo de ese importante centro colonial, el primero era la Casa del Gran Poder y el segundo la universidad; en el primero de estas construcciones fue asiento de la Inquisición y se destinó luego a la audiencia; la universidad fue fundada en marzo de 1624 con el nombre de San Francisco Javier, fecha en que sólo había otras dos similares en América, la de México y la de San Carlos en Lima; estuvo a cargo de los jesuitas hasta su expulsión en 1767. 

Fue uno de los grandes centros de la cultura colonial y punto de partida de reiterados movimientos de emancipación política, en 1544, en 1780 y en mayo de 1809 y se puede concluir que la unión de la historia totalmente interrumpida en el Río de la Plata después de la salida de Irala de Buenos Aires incendiado, se reanuda para el país en 1543, cuando las huestes de Diego de Rojas hacen su entrada en el territorio desde el Cuzco, expedición que incorporó al virreinato del Perú las provincias indígenas del Tucumán.

Cuando se fundó por segunda vez la ciudad de Buenos Aires, ya existía relativamente organizado y cohesionado el Tucumán y no era un hecho aislado, como el de 1536, sino que respondía a un organismo social y económico poderoso que necesitaba un puerto para sus importaciones y exportaciones y para acelerar el tránsito hacia Chile y el Alto Perú, ahorrando el largo rodeo de Portobelo, Panamá, Lima, Arequipa, La Paz, Charcas, Santiago de Chile y Córdoba.