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José
Félix Uriburu nació en la ciudad de Salta, el 20 de julio de 1868. Su vocación castrense se concreta el 17 de marzo de 1885, cuando
ingresa como cadete en el Colegio Militar. Con el grado de
subteniente participa en las filas del movimiento revolucionario de
1890, que culminó con la renuncia del Presidente Juárez Celman.; prestó
servicios en la provincia de Formosa; fue ayudante de su tío José E. Uriburu
en 1893 y del presidente Luis Sáenz Peña; en 1905 apoyó a Quintana para
sofocar la revolución Radical, fue director de la Escuela Superior de Guerra en
1907 y luego fue enviado a Europa para Observar programas de entrenamiento
militar y equipos; cuando regresó a Buenos Aires, asistió a los congresos
científicos de la celebración del centenario y luego estuvo a cargo de puestos
fronterizos como oficial de estado mayor; en 1913, regresó a Europa como
agregado militar en Alemania e Inglaterra.
Cuando retornó a la Argentina, fue electo diputado de su propia provincia en el
Congreso Nacional, 1914; en 1921 ascendió a general de división; al año
siguiente, actuó como inspector general del ejército designado por el
presidente Alvear; miembro del Consejo Supremo de Guerra desde 1926 hasta que
Yrigoyen lo hizo retirar por haber alcanzando la edad reglamentaria. |
El 6 de septiembre de 1930, Uriburu puso fin al gobierno de Yrigoyen y estableció
una dictadura militar; reconocido presidente por la Corte Suprema, Uriburu
disolvió el Congreso, declaró el estado de sitio, intervino las provincias y,
en rasgos generales, quiso implantar un gobierno elitista autoritario: aun que públicamente
declaraba respetar la constitución, personalmente sentía que la nación
necesitaba retornar al gobierno conservador.
Le resultó imposible obtener apoyo político para ese fin; en tanto, su
encarcelamiento de prisioneros políticos, su censura de diarios, su intervención
de las universidades y sus acciones --generalmente dirigidas contra los
radicales-- así como sus prejuicios contra las acciones democráticas
debilitaron el apoyo público; otros críticos temían que intentara destruir la
Constitución y las leyes electorales e imponer patrones extranjeros en la nación;
los líderes civiles y militares, ambiciosos de poder político, le temían.
Después de permitir elecciones libres en Buenos Aires a principios de 1931 y
luego de anular los resultados porque ganaron los radicales, no estuvo de
acuerdo en permitir votaciones nacionales pero en noviembre hubo sufragios y el
presidente electo fue su rival militar, el general Agusto P. Justo.
Uriburu marchó al extranjero por motivos de salud; murió en París, unos meses
más tarde, luego de una intervención quirúrgica. |